¿El tirón de Salvador?

La política en este país tiene eso. Tienes un ministro mediocre, tirando a malo, que ha hecho una gestión nefasta de la pandemia – precisamente cuando los grandes retos son la gran oportunidad para catapultar hacia la gloria a un líder-, lo quitas de en medio en uno de los peores momentos de la crisis dejando la casa a medio barrer, y lo invistes de candidato del partido para presidir la Comunidad más compleja de España. Y todo ello bajo un increíble argumento: el tirón de Illa. ¿Tirón? ¿Qué tirón? Debe ser que todo lo que sale en la tele se vende, porque no será por las nulas dotes de gestor que ha demostrado a la nación entera. Incapacidad para prever, para organizar, para comprar, para planificar y para tomar decisiones acertadas y, sobre todo, justas. Los ciudadanos de Madrid podríamos escribir una larga lista de los agravios que han protagonizado contra nosotros, Salvador Illa y Su Persona. Torpeza mayúscula. Arrieritos somos y en las urnas nos veremos. Por quedar mal, como Cagancho en Almagro, hasta ha salido huyendo por la ventana. No ha querido resumir su “brillante” gestión como ministro de Sanidad ante el Congreso, ante los representantes del pueblo español. Quizá en la campaña catalana, para la que estaba programado cual robot humanoide desde hace un año, le monten una película, solo apta para creyentes socialistas, en las que aparezca como el dechado de todas las virtudes sin mezcla de mal alguno. Adiós, Salvador. Buen viaje. Los catalanes te esperan para votarte o para evitarte. En cualquier caso, no les perjudiques en demasía.

Autor : Agustín del Pino

Imagen : @HUMORJMNIETO